Habitará en nuestra tierra
Oración al estilo de Taizé
Berazategui, 14 de diciembre de 2008
Cantos
• Ven Espíritu de Dios (Tui amoris ignem, Taizé)
• Tengo sed de ti (Bless the Lord, Taizé)
Salmo
con respuesta cantada: El Señor (El Senyor, Taizé)
Fuiste bueno, Señor, con tu tierra,
cambiaste la suerte de Jacob;
perdonaste la culpa de tu pueblo,
cubriste todos sus pecados.
¿No volverás a darnos la vida,
para que tu pueblo se alegre en ti?
¡Manifiéstanos, Señor, tu misericordia
y danos tu salvación!
Voy a proclamar lo que dice el Señor:
el Señor promete la paz,
la paz para su pueblo y sus amigos,
y para quienes se convierten de corazón.
Su salvación está muy cerca de sus fieles,
y la Gloria habitará en nuestra tierra.
El Amor y la Verdad se encontrarán,
la Justicia y la Paz se abrazarán;
la Verdad brotará de la tierra,
y la Justicia mirará desde el cielo.
El mismo Señor nos dará sus bienes
y nuestra tierra producirá sus frutos.
La justicia irá delante de él,
y la Paz, sobre la huella de sus pasos.
— del salmo 85 (84)
Lectura bíblica
Así habla el Señor:
Sí, yo voy a crear un cielo nuevo y una tierra nueva.
No quedará el recuerdo del pasado
ni se lo traerá a la memoria,
sino que se llenarán de gozo y se alegrarán para siempre
por lo que yo voy a crear:
porque yo voy a crear a Jerusalén para la alegría
y a su pueblo para el gozo.
Jerusalén será mi alegría,
yo estaré gozoso a causa de mi pueblo,
y nunca más se escucharán en ella
ni llantos ni alaridos.
Ya no habrá allí
niños que vivan pocos días
ni ancianos que no completen sus años.
Edificarán casas y las habitarán;
plantarán sus viñas y comerán sus frutos:
no edificarán para que habite otro
ni plantarán para que coma un extraño,
porque mi pueblo vivirá tanto como los árboles
y mis elegidos disfrutarán de la obra de sus manos.
Ellos no se fatigarán en vano
ni tendrán hijos para un fin desastroso,
porque serán la estirpe de los bendecidos por el Señor,
ellos y sus descendientes junto con ellos.
Antes que llamen, yo les responderé.
Estarán hablando, y ya los habré escuchado.
El lobo y el cordero pastarán juntos,
el león comerá hierbas como el buey
y la serpiente se alimentará de polvo:
No se hará daño ni estragos
en toda mi Montaña santa,
dice el Señor.
— Isaías 65. 17–20a,21
Canto
• En ti, Señor (Mon âme se repose, Taizé)
Silencio
Oración de intercesión
con respuesta cantada: Kyrie 1 (Taizé)
Para que los pueblos vivan en la unidad y la justicia,
y tu promesa de paz resuene donde hay guerra y rumores de guerra:
¡ven pronto, Señor!
Para que tu creación, que nosotros hemos herido y devastado,
vuelva a ser nuestra casa amada, cuidada y respetada:
¡ven pronto, Señor!
Para que no ya haya niños que vivan pocos días,
jóvenes que vean truncadas sus vidas y esperanzas,
ni ancianos que no completen sus años:
¡ven pronto, Señor!
Para que cese toda forma de discriminación y violencia,
y el diálogo se abra paso en medio de los conflictos:
¡ven pronto, Señor!
Para que las iglesias cristianas sean lugar de comunión
y semilla de esperanza en la familia humana:
¡ven pronto, Señor!
Con tu venida, Señor, nos das la vida
y tu pueblo se alegra por tu amor:
¡ven pronto, Señor!
(Oraciones libres con la misma respuesta cantada)
Padre nuestro
Oración
Jesús, luz de nuestros corazones,
tú pones al alcance de nuestra fragilidad humana
una espera, la espera de tu presencia.
Aunque sin comprenderlo siempre,
quisiéramos vivir de la bella esperanza del Evangelio,
y retomar ahí el impulso de un nuevo comienzo.
— hno. Roger, de Taizé
Cantos
• De noche (Taizé)
• Velaré contigo, Señor (Bleibet hier, Taizé)
• Toda la tierra espera
1. Toda la tierra espera al Salvador
y el surco abierto a la obra del Señor;
es el mundo que lucha por la libertad
reclama justicia y busca la verdad.
2. Dice el Profeta al pueblo de Israel:
«de Madre virgen ya viene el Emmanuel»;
será «Dios con nosotros», hermano será,
con Él la esperanza al mundo volverá.
3. Cerros y valles habrá que preparar;
nuevos caminos tenemos que trazar,
el Señor está cerca, hay que irlo a encontrar,
y todas las puertas abrir de par en par.
4. En un pesebre Jesús apareció,
pero en el mundo es donde nace hoy;
vive en nuestros hermanos, con ellos está,
y vuelve de nuevo a darnos libertad.
Letra y música: Alberto Taulé.
Cantemos hermanos con amor, O. Catena y J. Bevilacqua
• La noche de los pobres
1. El niño ha nacido
bajo la enramada,
tiene la mirada
azul.
Los sauces le mecen
canciones de cuna,
redonda la luna
está.
Estr. Es la noche de los pobres,
es la noche del amor.
Nace pobre y es el Rey,
tiene hambre y es el Pan,
tiene frío y es el Sol.
¡Duerme, que velan
tu sueño, Jesús,
las cuatro estrellas
de la Cruz del Sur!
2. El niño se duerme,
la madre lo besa,
le da su tibieza
un buey.
Traen los pastores
su amor de colores
y en los corazones
miel.
Letra y música: José María Santini.
Canto y Fe de América Latina, Iglesia Evangélica del Río de la Plata 2005
• Nada te turbe (Taizé)
Oración del hermano Roger: © Ateliers & Presses de Taizé, Communauté de Taizé, 71250 Taizé, France.
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